Las páginas web accesibles aumentan las visitas, mejoran la posición en los buscadores y reducen costes, según un estudio

Cada vez son más las web que incluyen recursos multimedia, pero son pocos los casos en los que se cumplen los criterios de accesibilidad
Por EROSKI Consumer 31 de marzo de 2009

Investigadoras de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) han llevado a cabo un estudio que demuestra que hacer accesibles las páginas web a personas con discapacidad aumenta el número de visitas, mejora la posición en los buscadores, facilita la navegación y reduce el coste de mantenimiento.

Según las profesoras Lourdes Moreno, Paloma Martínez y Belén Ruiz, cada vez son más las páginas web que incluyen recursos multimedia, pero son pocos los casos en los que se cumplen los criterios de accesibilidad que marcan los estándares para los contenidos en la Red, como las normas WCAG 1.0 y WCAG 2.0.

«A grandes líneas habría que conseguir una cadena de requisitos de accesibilidad como incluir contenidos alternativos al recurso multimedia (subtitulado, audiodescripción), universalizar los formatos lo más posible y que todos estos contenidos se incluyan en la web siguiendo los estándares», explicó Lourdes Moreno, que junto a sus compañeras trabaja en la definición de un soporte metodológico desde el punto de vista de la ingeniería, proporcionando recomendaciones sobre cómo diseñar y desarrollar una aplicación web accesible.

Ventajas

Las páginas web accesibles son más fácilmente navegables porque se puede acceder a ellas a través de una diversidad de dispositivos y no sólo desde el ordenador de sobremesa o portátil, señalaron las investigadoras. Además, la accesibilidad web sigue principios de diseño separando estructura, presentación y contenido, lo que hace que estos sitios sean más consistentes y que sea fácil administrar su contenido, lo que reduce los costes de mantenimiento, porque se convierten en aplicaciones escalables con facilidad para los rediseños y las ampliaciones de contenidos, por ejemplo, añadieron.

Asimismo, las páginas accesibles suelen ocupar una buena posición en los buscadores de Internet porque incorporan semántica en el código fuente que puede ser interpretada por los motores de búsqueda. «Esta semántica que se incluye al seguir las pautas de accesibilidad coincide con la que los algoritmos de los buscadores como Google utilizan para situar en los mejores puestos, lo que se traduce en un mayor número de visitas, además de cumplir la normativa en los casos marcados por la ley y no discriminar a ningún colectivo sensible de ser excluido en la sociedad de la información», apuntó Paloma Martínez.

A todo lo anterior habría que añadir que el usuario debe estar involucrado en todo el proceso de diseño de la aplicación, dijeron las investigadoras. «No hay que quedarse sólo con las pautas de las WCAG, porque es importante llegar hasta el final de la cadena de la accesibilidad y servir los contenidos de manera universal atendiendo a las necesidades de todos los usuarios», agregó la profesora Moreno.

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